lunes, 5 de agosto de 2019

Pingyao

Llegamos a la ciudad amurallada de Pingyao en el tren nocturno desde Datong a las 06:00 de la mañana, con solo 5 minutos de retraso.


!!! Pingyao tiene dos estaciones. Una en la que llegan y salen los trenes lentos, en el centro de la ciudad, y otra desde la que llegan/salen los trenes rápidos, que se llama Pingyao Guancheng. A esta estación, que está algo más alejada de la ciudad -a unos 15 minutos- es a la que tendremos que ir mañana para coger nuestro tren a Xi’an.

Nosotros llegamos a la estación que está en el centro de la ciudad. Como nos alojamos dentro de las murallas decidimos coger un taxi para que nos lleve al alojamiento, que nos deja justo en la puerta Sur -los taxis no pueden entrar dentro de la muralla- por 20 yuanes. De ahí al hotel hay 20 metros caminando, aunque la propietaria de nuestro alojamiento nos viene a recoger a nuestra llegada al taxi.

¿Como está el hotel? El City Wall Old House está bastante bien. Tiene wifi que funciona perfectamente, aire acondicionado, TV, agua caliente y lo mejor, una cama de más de tres metros de ancho, de pared a pared. La habitación es algo pequeña, pero perfecta por su ubicación, cerca de los principales puntos de interés. La propietaria habla un inglés perfecto, y es muy agradable. Las habitaciones están situadas en un jardín muy chulo.



Como llegamos prontísimo y en el tren hemos dormido poco, decidimos descansar un rato antes de salir a dar una vuelta. Por suerte nos dan la habitación nada más llegar. 

Sobre las 09:30, algo más descansados, vamos a dar una vuelta. Para visitar los principales monumentos de Pingyao, incluido el paseo por encima de la muralla, hay que comprar una entrada conjunta que te venden en determinadas taquillas situadas dentro de la zona de la muralla (cerca de las puertas de entrada) y también cerca de los principales puntos de interés. Te sirve para tres días. Hay que tener en cuenta que para pasear por la zona interior de la muralla no te cobran, pero sí para entrar en los puntos turísticos y para pasear por encima.

La entrada nos ha costado 65 yuanes por persona porque nos han aceptado el carnet de estudiante internacional. Sin el mismo, hay que pagar 130 yuanes por persona. 

Una vez comprado el ticket ya estamos listos para visitar Pingyao, la ciudad antigua amurallada mejor conservada de China. Desde el inicio esta ciudad nos deja fascinados y nos damos cuenta que merece la pena pasar aquí como mínimo un día. Tenemos que decir que solo hemos visitado de muralla para dentro, pero pasar unas horas aquí supone transportarte a la edad media de China, y aunque es verdad que la mayoría de cosas está montado para el turista (no solo extranjero, también local) -os daréis cuenta nada más ver sus múltiples tiendas de souvenirs- tiene un encanto excepcional que nos ha enamorado. Las calles con sus farolillos rojos, los negocios de artesanía de antaño...

Además de los principales puntos de interés que enumeramos a continuación, Pingyao tiene infinidad de atracciones a visitar en su casco antiguo, la mayoría antiguas casas que han ambientado con objetos de la época para reconstruir cómo vivían siglos atrás. De esta forma, podrás ver cómo funcionaban los bancos antaño, cómo estaba organizada una casa típica...

Además de estas atracciones vemos: 

- The Ancient Government Building: todo un entramado de estancias y patios en los que se recrea cómo funcionaba un edificio gubernamental de la época, con sus juzgados, la casa del gobernador, la sala en la que encerraban a los detenidos...





A la salida del Ancient Government Building subimos a la Torre Fengshui que hay justo al lado, y de ahí nos vamos a pasear por la Calle Nan dajie, la principal del casco antiguo, con sus múltiples restaurantes y tiendecitas típicas y en la que se encuentra la famosa Torre de la Ciudad, el edificio más alto del casco antiguo. 

Torre de la Ciudad

Torre de la Ciudad
Torre Fengshui

Tenemos ya hambre, así que hacemos una parada para reponer fuerzas y comer una especie de arroz tres delicias y una sopa de noodles con ternera en un restaurante que hay en el cruce entre Nan dajie y la calle Dougnanmen Toujie. Aprovechamos para descansar un rato del calor infernal que hace hoy...


Desde la Torre de la Ciudad paseamos tranquilamente por la Calle Nan dajie camino al Templo del Dios de la Ciudad, a unos 15 minutos. Las estampas que vemos mientras paseamos son auténticas: 


Tortugas reales con el caparazón pintado




















Llegamos tranquilamente al Templo del Dios de la Ciudad, el segundo que visitamos tras el de Shanghái. Al igual que aquel, es un templo taoísta. A la salida, casi enfrente, se encuentra el Muro de los Nueve Dragones, justo en una de las paredes de lo que antiguamente era el teatro de Pingyao y que hoy es un hotel. Y justo al lado está también el Templo de Confucio, que cuenta con el salón de Dacheng, el edificio más antiguo que sobrevive de la ciudad, de 1163.

Templo del Dios de la Ciudad

Templo del Dios de la Ciudad
Muro de los Nueve Dragones

Templo de Confucio

Después del calor de todo el día estamos ya reventados, y aprovechamos para darnos unos masajes :) Y tranquilamente, después del relax, nos acercamos a la zona de la Muralla, pero cierran a las 18:00 y ya no podemos entrar. Lo dejamos para el día siguiente, y ponemos rumbo a un restaurante que nos ha recomendado la propietaria de nuestro hotel, llamado Tian Yuan Kui (en Nan dajie) que además de estar repleto de locales, se come de vicio. Aquí una ternera con patatas y unos dumplings de champiñones tremendos.



Al salir, tranquilamente, vamos al hotel a descansar. 

GASTOS DEL DÍA

- Taxi estación al hotel: 20 yuanes
- Entrada para visitar los monumentos: 65 yuanes por persona --> 130 yuanes
- Agua: 4 yuanes
- Vestido Lia: 50 yuanes
- Comida arroz, sopa de noodles, cerveza y zumo: 85 yuanes
- Helados: 9 yuanes
- Postales: 3 yuanes
- Muñeco: 35 yuanes
- Aguas: 8 yuanes
- Hotel: 246,85 yuanes
- Sandía: 10 yuanes
- Leche: 5 yuanes
- Cena ternera con patatas y dumplings: 132 yuanes
- Masajes: 50 yuanes

No hay comentarios:

Publicar un comentario