Hacía tiempo que teníamos una smartbox de esas que queríamos gastar, y nunca encontrábamos el fin de semana adecuado. Hasta este último. Después de mirar en varios sitios de España (Zaragoza, León, Pamplona...) nos decantamos por Cáceres, donde hemos pasado un fin de semana en un pueblo que se llama Zarza de Granadilla.
Nos hemos alojado en unas casas rurales que se llaman Posadas de Granadilla, muy chulas, perfectamente equipadas con microondas, horno, lavavajillas, todo tipo de utensilios de cocina, nevera, TV, y un baño y una habitación muy amplios. Para quien quiera echar un vistazo: www.posadasdegranadilla.com Ah! y con wifi,,,
Aunque allí hemos establecido el punto base, nos hemos movido durante todo el fin de semana. Llegamos el viernes por la noche, así que no tuvimos tiempo para nada más que para picar algo, ver un rato la tele y a dormir.
El sábado nos levantamos medio pronto y fuimos a desayunar a un bar del pueblo, El Canalón, que tiene un acuerdo con los alojamientos rurales para todo aquel que tenga el desayuno incluido.
Después de comprar algo en un supermercado del pueblo para cenar, cogemos el coche y ponemos rumbo a Granadilla, una antigua villa amurallada, que únicamente se puede visitar durante algunas horas del día y que cuenta en su interior con un castillo y una muralla muy curiosos.
Al terminar nuestra visita por Granadilla, nos acercamos a Abadia, Un pueblo de apenas 300 habitantes donde se ubica el Palacio de Sotofermoso, una abadia que solo abre los lunes por la mañana y cuando no es festivo.
Como está cerrada, poco más podemos ver en el pueblo, así que volvemos a coger el coche y vamos a visitar Hervás.
Como está cerrada, poco más podemos ver en el pueblo, así que volvemos a coger el coche y vamos a visitar Hervás.
Al terminar ponemos ahora rumbo al Restaurante El Castillo, entre Jerte y Cabezuela del Valle, que es de un amigo y hemos quedado en que hoy comeremos ahí. El rato de la comida lo pasamos genial: tomamos patatas revolconas, cabrito asado, solomillo a la pimienta, un vino de la tierra (Payva) y de postre tarta de queso y mousse de cerezas. Impresionante!
Al salir del restaurante decidimos ir a pasar la tarde a Plasencia, que no la conocíamos. La lástima es que nos coge una tormenta impresionante y apenas podemos acercarnos a visitar la Plaza Mayor y la Catedral. Poco más hacemos hoy, hace un tiempo horrible... Así que decidimos volver a la casa rural y pasar allí el resto de la noche.
El Domingo nos levantamos pronto para recoger y dejar la casa lista a las 12. Pero todavía nos queda un par de visitas que hacer: la primera, a la Ciudad Romana de Cáparra, una visita que vale la pena si estás por la zona.
La siguiente parada es Hervás, otro pueblo cercano muy chulo que, entre otras cosas, cuenta con una Judería que vale la pena visitar.
Hoy el tiempo tampoco acompaña, así que después de dar una buena vuelta por el pueblo decidimos volver al coche y regresar a Madrid. Ha sido un fin de semana corto, pero muy intenso. ¡Hasta la próxima!
Hoy el tiempo tampoco acompaña, así que después de dar una buena vuelta por el pueblo decidimos volver al coche y regresar a Madrid. Ha sido un fin de semana corto, pero muy intenso. ¡Hasta la próxima!
