Empieza la aventura. A las 09:00 de la mañana ya estamos listos para empezar un trekking de tres días, 55 kilómetros en total, que nos llevará desde Kalaw hasta el Lago Inle.
En Kalaw hay mucha oferta de agencias, hoteles y oficinas donde contratar el trekking. Como explicamos en el post anterior, nosotros lo contratamos en la Golden Lilly.
El precio, 36.000 MMK por persona (unos 36 dólares) incluye sitio para dormir las dos noches (una primera en una casa de una aldea y la segunda en un monasterio), el guía, todas las comidas (excepto bebidas), el bote por el Lago Inle hasta Nyaung Shwe y el transporte de mochilas, desde el hotel de Kalaw, hasta otro hotel en destino. ¡Cuanto menos equipaje lleves, mejor!
El primer día recorres 20 kilómetros. Nosotros tenemos mucha suerte porque vamos con un grupo de 6 personas más, todos de Barcelona. Gente increíble.
El primer día resulta bastante "sencillo", por decirlo de alguna forma, el sendero es bastante cómodo, el problema es que nos llueve a ratos y hay muchos momentos en los que el camino está completamente embarrado. No obstante, tenemos bastante suerte con el tiempo, y siempre que aprieta estamos resguardados.
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| Paisaje durante el trekking |
Durante el trayecto cruzamos enormes plantaciones de trigo, arroz, te, patatas... A ratos andas por caminos de barro, otros por carreteras pavimentadas. Y durante el camino te vas cruzando con locales montados en animales de carga o transportando objetos, e incluso pasas por alguna que otra aldea donde puedes coincidir con sus habitantes... Es muy chulo.
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| Locales que nos encontramos durante el camino |
El camino antes de la parada para merendar es bastante chulo, pasamos un buen rato andando por una vía de tren y justo cuando estamos en ese tramo, tenemos que apartarnos ¡porque justo pasa uno! Salimos a las 09:00 y llegamos a la aldea donde pasaremos la noche en torno a las 17:30-18:00.
Nos alojamos en la azotea de una de las casas de una de las familias que nos acogerán esta noche y ahí pasamos ya todo el rato, charlando, descansando e incluso cenando con el resto de compañeros. Pasamos una noche muy chula. La cena de está noche ha estado genial, y la prepara un cocinero que nos irá acompañando a lo largo de todo el trekking.
Nuestro guía, James, es un hombre muy agradable. Es un profesor de matemáticas, ya jubilado, que hace el itinerario una o dos veces por semana para ganar algo de dinero y cuidarse. Habla bastante bien el inglés y nos cuenta que está casado (por primera vez) con una mujer 20 años más joven que él y que tiene dos hijos, uno de 18 y otro de 14 años.
Llegan las 22:00 y nos vamos a dormir. ¡Mañana a las 05:15 ya estamos en pie!
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